Barras de compota de manzana con pasas: historia y origen
Las barras de compota de manzana con pasas son un postre tradicional que combina la dulzura natural de la manzana con el toque especial de las pasas. Este platillo tiene sus raíces en la cocina casera estadounidense, especialmente popular durante las estaciones otoñales cuando las manzanas están en su mejor momento. En América Latina, aunque no existen nombres exactos para esta receta, platos similares se conocen como "barras de fruta" o "barras de manzana", y suelen prepararse con variaciones regionales en los ingredientes y la textura.
En países como México, Argentina y Chile, las barras de fruta suelen incluir otros tipos de frutas secas y especias, manteniendo la idea de un postre fácil de transportar y compartir en reuniones familiares o escolares. A través de los años, esta receta ha sido adaptada a distintos paladares, incorporando desde ingredientes más saludables hasta combinaciones con frutos secos variados. Su versatilidad ha hecho que se convierta en un clásico para quienes disfrutan de postres caseros con un sabor auténtico y tradicional.
Como preparar Barras de compota de manzana con pasas
Para comenzar, mezclar todos los ingredientes en un tazón hasta obtener una mezcla homogénea.
Incorporar las pasas suavemente para que queden distribuidas de manera uniforme en la mezcla.
Verter la preparación en un molde para hornear de 7 x 11 pulgadas, previamente engrasado o cubierto con papel para hornear.
Hornear a 350 grados Fahrenheit durante 20 a 25 minutos, o hasta que el borde se vea dorado y un palillo salga limpio al insertarlo.
Mientras el pastél se enfría, preparar la cobertura derritiendo mantequilla en un sartén pequeño hasta que esté dorada.
Batir el azúcar glas, la vainilla y la leche hasta formar un glaseado suave y cremoso.
Finalmente, glasear el pastel ya enfriado con esta mezcla y dejar que el glaseado se asiente antes de cortar y servir.