Historia y Origen de la Cazuela de Papa
La cazuela de papa es un plato tradicional que tiene sus raíces en la cocina casera de Estados Unidos, especialmente popular en la región del Medio Oeste. Originalmente, este platillo se preparaba como una forma sencilla y reconfortante de aprovechar ingredientes básicos y crear una comida completa y deliciosa. La combinación de papas ralladas con una variedad de ingredientes cremosos y crujientes ha hecho que sea un favorito en reuniones familiares y ocasiones especiales.
En distintos países de Latinoamérica, aunque no existe una traducción exacta ni un plato idéntico, se pueden encontrar preparaciones similares que utilizan papas y quesos en cazuelas o gratinados. Por ejemplo, en México, platillos como el pastel de papa o los gratinados tienen un concepto parecido. En Argentina y Uruguay, el término "cazuela" se usa para guisos o preparaciones horneadas que también pueden incluir papas, pero con variaciones en ingredientes y sabor local.
Este plato es conocido en inglés como "Potato Casserole" o "Hash Brown Casserole" y ha evolucionado con el tiempo para incorporar versiones más saludables, como el uso de crema agria baja en grasa y quesos sin grasa para reducir el contenido calórico manteniendo el sabor y la textura.
Como preparar Cazuela de papa con crema agria baja en grasa
Esta deliciosa cazuela combina la textura crujiente de las papas ralladas con una mezcla cremosa que incluye crema agria baja en grasa y queso cheddar sin grasa, ideal para quienes buscan una opción más saludable sin sacrificar sabor.
Ingredientes: Papas ralladas congeladas, cebolla, sopa de champiñones baja en grasa, miel, sal, pimienta negra, crema agria baja en grasa, queso cheddar sin grasa, margarina reducida en grasa y corn flakes.
Pasos para la preparación:
Precalienta el horno a 175°C.
Prepara un molde de 23 x 33 cm con spray para cocinar.
Reserva el molde preparado.
En un tazón para mezclar, combina papas ralladas, cebollas, sopa, miel, sal, pimienta negra, crema agria y queso.
Mezcla bien hasta integrar todos los ingredientes.
Coloca la mezcla en el molde preparado.
En un tazón pequeño, combina margarina y migas de corn flakes.
Esparce uniformemente la mezcla de margarina y migas sobre la cazuela.
Hornea por 45 minutos o hasta que la superficie esté dorada y crujiente.
Disfruta de esta cazuela caliente, perfecta para acompañar cualquier comida o como plato principal liviano.
