El cheesecake salado es una deliciosa variante de la tradicional tarta de queso, que ha conquistado paladares en varias partes del mundo. En Latinoamérica, aunque el cheesecake dulce es más común, algunas regiones han adoptado versiones saladas con ingredientes locales. En países como México y Argentina, este plato puede encontrarse bajo el nombre de "tarta salada de queso" o "pastel de queso salado", mientras que en otros lugares es conocido simplemente como "cheesecake salado". La inclusión de ingredientes como el cangrejo le otorga un toque especial, combinando sabores marinos con la cremosidad típica del queso. Esta receta tiene su origen en la cocina estadounidense, donde el uso del cangrejo es frecuente en platillos costeros, pero su adaptación a versiones saladas de cheesecake ha ganado popularidad internacionalmente.
Esta preparación es ideal para aperitivos o para disfrutar en reuniones, ya que su combinación de texturas y sabores resulta delicada y sofisticada. Además, el uso del queso ricotta ligero y otros ingredientes hace que sea una opción un poco más saludable y ligera que los cheesecakes tradicionales. Sin duda, es una receta que refleja la fusión de influencias culinarias y el ingenio para crear platillos únicos.