Las magdalenas de limón esponjosas son un clásico de la repostería que tiene sus raíces en la tradición europea, especialmente en Francia y España. Este tipo de pastelito ha sido adaptado y popularizado en diversos países de Latinoamérica, cada uno con su toque especial. En México, por ejemplo, suelen llamarse simplemente magdalenas, mientras que en Argentina y Chile también se les conoce como muffins de limón, dado su parecido con estos pequeños bizcochos individuales. En muchos hogares, las magdalenas se disfrutan como una merienda dulce perfecta para acompañar el café o el té.
Esta receta destaca por la frescura y acidez del limón, combinada con la textura suave y esponjosa del bizcocho, lo que las hace irresistibles. Además, la incorporación del coco rallado aporta un contraste de sabores y texturas que las convierte en una opción diferente y deliciosa. Las magdalenas de limón son ideales para quienes buscan un postre sencillo pero lleno de sabor, que puede disfrutarse en distintas ocasiones y temperaturas.
Como preparar Magdalenas de limón esponjosas
En un tazón grande, combina la harina, el azúcar, el polvo para hornear, el bicarbonato de sodio y la sal.
En otro tazón, bate el yogur, el huevo, la mantequilla, la cáscara de limón y el jugo de limón hasta que esté suave.
Incorpora a los ingredientes secos hasta que se humedezcan.
Agrega el coco con movimientos envolventes.
Llena los moldes para muffins engrasados hasta dos tercios.
Hornea a 400°F por 18-22 minutos o hasta que estén dorados y al probar los muffins estén listos.
Deja enfriar por 5 minutos antes de sacar del molde a una rejilla.
En una cacerola, combina el jugo de limón y el azúcar.
Cocina y revuelve hasta que el azúcar se disuelva.
Agrega el coco.
Con un palillo, haz 6-8 agujeros en cada muffin.
Vierte la mezcla de coco sobre los muffins.
Sirve tibio o a temperatura ambiente.
Hemos descubierto que preferimos comerlos fríos ya que el sabor a limón no es tan intenso una vez que alcanzan la temperatura ambiente.