La mezcla de condimentos de limón y pimienta es un aderezo popular que ha sido utilizado en diversas culturas gastronómicas a lo largo de América Latina. Su origen se remonta a la fusión de sabores indígenas y españoles, donde las especias locales se combinaron con métodos europeos de conservado y condimentado. En países como México, Colombia y Argentina, esta mezcla se conoce comúnmente como "Adobo cítrico con pimienta" o simplemente "Mezcla de limón y pimienta", aunque el ingrediente base suele variar ligeramente según la región, incorporando hierbas autóctonas o cambiando el tipo de pimienta utilizada.
Esta combinación es especialmente apreciada por su capacidad para realzar el sabor de carnes, pescados y verduras, aportando un toque cítrico fresco junto con el picor característico de la pimienta negra. Además, es una mezcla versátil que puede adaptarse a diferentes preparaciones, desde marinados hasta salsas secas para parrillas.