El pao doce, conocido también como pan dulce portugués, es una tradición culinaria que tiene sus raíces en Portugal, donde se ha disfrutado durante generaciones, especialmente en festividades y ocasiones familiares. Este pan suave y ligeramente dulce es muy valorado por su textura esponjosa y su delicado sabor. En varios países de Latinoamérica, este tipo de pan recibe diferentes nombres según la región, como "pan dulce" en México y otros países, aunque la receta puede variar ligeramente. Sin embargo, el pao doce conserva un toque especial debido a los ingredientes seleccionados y al método artesanal tradicional portugués.
Históricamente, el pao doce data de épocas en las que la panadería casera era una práctica común, y su preparación se consideraba un arte. La inclusión de la papa en la masa es una particularidad que ayuda a mantener la humedad y suavidad del pan por más tiempo, diferenciándolo de otros panes dulces. Su popularidad se ha extendido más allá de Portugal, llegando a comunidades portuguesas en América Latina y otras partes del mundo, donde se sigue preparando con cariño y respeto a la tradición.
Como preparar Pao doce pan dulce portugués
Hervir la papa hasta que esté blanda.
Guardar 1/4 de taza del agua en la que se hirvió la papa y enfriar hasta que esté tibia.
Machacar la papa y medir 1/2 taza.
Agregar 2 cucharadas de azúcar y la levadura al agua tibia de papa, revolver para disolver.
Incorporar la papa machacada y dejar reposar la mezcla hasta que doble su volumen.
Escaldar la leche, agregar sal y enfriar hasta que esté tibia.
Derretir la mantequilla y enfriar.
En un tazón grande y tibio, batir los huevos.
Retirar 1 cucharada de huevo para usar en barnizar la parte superior de los panes.
Agregar gradualmente el azúcar y luego la mantequilla derretida, batiendo.
Combinar las mezclas de huevo y levadura.
Mezclar bien.
Agregar 1 1/3 tazas de harina y 1/4 de taza de leche.
Batir hasta mezclar completamente.
Agregar otra 1 1/3 tazas de harina y batir hasta integrar.
Volcar la masa sobre una superficie enharinada.
Agregar la última 1 1/3 tazas de harina y amasar la masa hasta que sea suave y elástica, de 75 a 100 veces.
Formar una bola con la masa, colocar en un tazón engrasado, cubrir con un paño húmedo y dejar reposar en un lugar cálido.
Cuando haya doblado su volumen, desgasificar, dividir la masa en 2 bolas redondas y colocar en 2 moldes para pastel engrasados o en moldes para pan engrasados.
Dejar que doble su volumen.
Precalentar el horno a 350 grados.
Barnizar los panes con los huevos batidos.
Hornear por 35-45 minutos o hasta que estén dorados y cocidos.
Pueden congelarse.
Es posible que se tenga que agregar harina adicional para obtener una masa blanda.
La masa debe estar suave y no pegajosa después de amasar.