Las quesadillas son un platillo emblemático de la gastronomía mexicana, cuya raíz se remonta a la época prehispánica, cuando se combinaban ingredientes locales con técnicas culinarias ancestrales. Tradicionalmente, las quesadillas consisten en tortillas de maíz o harina rellenas de queso, aunque con el tiempo han incorporado diversos ingredientes según la región y gustos personales. En varios países de Latinoamérica, este platillo puede recibir nombres diferentes o presentar variaciones: en México se conocen simplemente como "quesadillas", en Colombia y Venezuela se asemejan a las arepas rellenas, mientras que en países como Argentina y Uruguay pueden recordar a las "empanadas" por su forma y relleno. Esta receptiva flexibilidad hace que la quesadilla sea un platillo querido y adaptado en muchas cocinas de la región.
Como preparar Quesadillas picantes de queso con champiñones
Para iniciar esta deliciosa receta, derrite 1 cucharada de mantequilla en una sartén grande a fuego medio.
Agrega la cebolla y cocina durante 3 minutos hasta que esté transparente.
Incorpora los champiñones, el ajo, tomillo seco, sal y pimienta negra molida fresca.
Cocina la mezcla de 5 a 7 minutos o hasta que el líquido se haya evaporado por completo.
Aparte, derrite las 2 cucharadas restantes de mantequilla.
Unta la mitad de esta mantequilla sobre un lado de 4 tortillas de harina.
Coloca las tortillas con el lado untado hacia abajo en una bandeja para hornear grande.
Cubre cada tortilla con 3/4 de taza de la mezcla mexicana picante de 6 quesos.
Distribuye uniformemente la mezcla de champiñones cocidos sobre el queso.
Cubre nuevamente con 3/4 de taza de queso de la mezcla mexicana.
Coloca las 4 tortillas restantes sobre el queso y presiona ligeramente para compactar.
Unta la mantequilla restante sobre la parte superior de las tortillas.
Hornea a 450 °F (aproximadamente 230 °C) por 5 a 6 minutos o hasta que las tortillas estén doradas en la parte superior.
Con cuidado, voltea las quesadillas y continúa horneando por 4 minutos más.
Espolvorea las quesadillas con la 1/2 taza de queso restante.
Continúa horneando por 1 minuto o hasta que las quesadillas estén doradas y el queso completamente derretido.
Corta las quesadillas en cuñas para servir.
Para darle un toque extra, acompaña con salsa gruesa y jugosa, aguacates frescos, crema ácida y cilantro al gusto.