La sopa de champiñones deshidratados es una preparación tradicional que tiene sus raíces en la cocina rural y de montaña, donde conservar alimentos mediante el secado era una práctica común para garantizar su disponibilidad durante todo el año. Su uso de hongos deshidratados, como las colmenillas, permite aprovechar sabores intensos y terrosos incluso cuando los productos frescos no están disponibles. En Latinoamérica, esta sopa puede encontrarse bajo diferentes nombres y variantes. Por ejemplo, en México se le conoce como "sopa de hongos secos", mientras que en países como Argentina y Chile se le denomina simplemente "sopa de champiñones deshidratados" o "caldo de hongos". Cada región adapta la receta con ingredientes locales, pero siempre manteniendo la esencia del sabor concentrado que brindan los hongos secos.
Como preparar Sopa de champiñones deshidratados
Para esta receta necesitarás los siguientes ingredientes: cebolla, apio, morel seco (u otros hongos deshidratados), harina, agua, leche enlatada, cubito de caldo de pollo, sal, pimienta y condimento sabor sal.
Comienza sofriendo cebolla y apio en mantequilla hasta que estén tiernos.
Tritura colmenillas u otros hongos con un rodillo y reserva.
Incorpora la harina a la mezcla de cebolla y apio, luego agrega el agua y los hongos triturados.
Cocina a fuego lento hasta que los hongos estén tiernos.
Agrega el caldo, la leche y los condimentos al gusto.
Calienta la sopa, pero evita que hierva, y sirve inmediatamente para disfrutar de todo su sabor.