La sopa de frijoles negros es un platillo tradicional con raíces profundas en la gastronomía de América Latina, especialmente popular en países del Caribe y Centroamérica. En República Dominicana, esta sopa se considera un plato dominical emblemático, donde se disfruta en reuniones familiares y celebraciones. Aunque en cada país varía el nombre y algunos ingredientes, en México y otras partes de Latinoamérica se le conoce comúnmente como "frijoles negros refritos" o "sopa de frijol negro". Este platillo refleja la influencia cultural afrocaribeña y la importancia del frijol como fuente principal de proteínas.
Además, la sopa de frijoles negros es valorada no solo por su sabor reconfortante, sino también por su versatilidad y la facilidad de encontrar sus ingredientes. En Venezuela se le llama "caraotas negras", mientras que en Cuba es un componente fundamental del "moros y cristianos", combinación de frijoles con arroz. Este plato ha trascendido fronteras y hoy se disfruta en muchas variantes a lo largo del continente, demostrando que una receta sencilla puede ser un símbolo de unión y tradición.
Como preparar Sopa de frijoles negros dominical
Para comenzar, para remojar los frijoles rápidamente, cúbrelos con una cantidad generosa de agua, tapa la olla, lleva el agua a ebullición y hierve durante 2 minutos.
Retira la tapa y deja que los frijoles reposen en el líquido durante una hora.
Escurre los frijoles y reserva.
En aceite caliente, sofríe zanahorias, cebollas, apio y ajo hasta que las cebollas estén doradas.
Agrega comino y chile jalapeño para darle un toque especial y aromático.
Cuando los frijoles estén listos para cocinar, añade codillos de jamón ahumado junto con las verduras salteadas, el caldo de pollo y suficiente agua para cubrir.
Cocina la mezcla de 1 1/2 a 2 horas, o hasta que los frijoles estén tiernos.
Escurre la mezcla de frijoles y reserva el líquido de cocción cuidadosamente.
Haz puré los frijoles junto con las verduras para obtener una textura suave y cremosa.
Agrega jerez seco, jugo de lima y suficiente líquido reservado para hacer una sopa espesa y llena de sabor.
Finalmente, sirve la sopa caliente, acompañada si se desea con cilantro picado, crema agria o una rodaja de limón para complementar su sabor.