El Stroganoff es un platillo de origen ruso que data del siglo XIX, nombrado en honor a la influyente familia Stroganov. Originalmente, esta receta combinaba cubos de carne salteada con una salsa cremosa de nata agria, cebolla y champiñones, que se convirtió rápidamente en un clásico de la cocina rusa. A lo largo del tiempo, el Stroganoff se popularizó en diversos países de América Latina, donde recibió nombres variados según la región. En México, es conocido comúnmente como "Stroganoff de res", mientras que en países como Argentina y Chile se mantiene el nombre original o se le llama también "carne a la Stroganoff". En otros lugares, como Perú, pueden adaptar la receta con ingredientes locales para darle un toque especial. Sin importar cómo se le nombre, este platillo destaca por la suavidad de su carne y el sabor reconfortante de su salsa cremosa.
El Stroganoff es ideal para quienes buscan una receta práctica y sabrosa que se pueda preparar con anticipación, especialmente en ollas de cocción lenta o crockpots, facilitando el proceso y potenciando los sabores.