La tarta de arándanos es un postre tradicional que ha conquistado paladares alrededor del mundo, especialmente en regiones donde el arándano es un fruto común. En Alaska, este dulce se ha convertido en un símbolo culinario, destacando por su frescura y su sabor característico. Aunque en diferentes países de Latinoamérica el arándano no es tan habitual, recetas similares con frutos rojos se conocen con nombres como pay de frutos rojos o tarta de mora, adaptándose a los ingredientes locales.
Su origen se remonta a la influencia de las cocinas europeas en Norteamérica, donde el uso del arándano en postres es muy popular, especialmente en Estados Unidos y Canadá. La tarta de arándanos de Alaska se distingue por la calidad y frescura de sus ingredientes, y su preparación que combina una base crocante con un relleno espeso y jugoso, ideal para acompañar en celebraciones o una merienda especial.