Tarta de frambuesa y manzana es un postre tradicional que combina la frescura y acidez de las frambuesas con el dulzor y textura de las manzanas. Esta mezcla crea un equilibrio perfecto entre sabores y texturas, ofreciendo un resultado delicioso y atractivo. La tarta con frutas ha sido popular en muchas culturas desde hace siglos, siendo un símbolo de las cosechas de otoño en regiones con clima templado. En Latinoamérica, aunque no siempre se utiliza el mismo nombre, postres similares se conocen como "pay de manzana y frambuesa" en México, mientras que en otros países como Argentina o Chile se le puede llamar simplemente "tarta de frutas". Cada región aporta sus propias variaciones, pero la esencia del postre se mantiene.
El uso de manzana Granny Smith, conocida por su sabor ácido, junto con frambuesas frescas, hace que esta tarta sea una opción refrescante y menos empalagosa que las versiones más tradicionales hechas solo con manzana o con frutas más dulces. La combinación de especias como la canela, el clavo y la nuez moscada agrega un aroma cálido que contrasta con la frescura de las frutas, logrando una experiencia gastronómica muy especial.
Como preparar Tarta de frambuesa y manzana
Para comenzar, congelar la harina en un tazón mediano por una hora.
Refrigerar la manteca por una hora y luego cortar en cubos.
En una taza pequeña combinar vinagre de sidra de manzana, sal y agua.
Medir 1 taza de harina sobre la mesa, colocar los cubos de manteca encima y cubrir con la harina restante.
Rodar el rodillo sobre la mezcla hasta que todas las piezas estén aplastadas y ligeramente incorporadas.
Raspar en un tazón y mezclar con el líquido preparado.
Volcar la masa sobre una superficie ligeramente enharinada.
Con un rodillo ligeramente enharinado, extender un rectángulo de aproximadamente 8 x 12 pulgadas.
Doblar hacia el centro y extender ligeramente para formar un cuadrado de 8 pulgadas.
Rodar y doblar una vez más.
Envolver en papel pergamino o encerado y refrigerar hasta que se necesite.
Pelar, cortar y descorazonar las manzanas en octavos.
Luego cortar en cubos de 1 1/2 pulgadas en sentido transversal.
Mezclar las manzanas con jugo de limón para evitar que se oxiden.
Mezclar 1/2 taza de azúcar con harina y especias: canela, nuez moscada y clavo.
Agregar las manzanas y mezclar hasta cubrir uniformemente con esta mezcla.
Agregar las frambuesas al final y mezclar ligeramente para no deshacerlas.
Cortar 1/3 de la masa y reservar para la decoración.
Extender la masa restante en un círculo 5 pulgadas más grande que el molde para tarta.
Colocar y ajustar la masa en el molde, recortar el borde sobrante dejando cerca de 1 pulgada.
Colocar las manzanas y frambuesas formando un domo uniforme en el centro.
Extender la masa reservada y hacer el borde decorativo que prefieras.
Espolvorear el azúcar restante sobre la corteza para dar textura y sabor.
Hacer 5 cortes en el centro de la masa para permitir la ventilación durante el horneado.
Hornear a 425 grados Fahrenheit por 10 minutos, luego bajar la temperatura a 400 grados por 40 minutos, girando la tarta para que se dore uniformemente.
Dejar enfriar antes de servir para que los sabores se asienten y la tarta tome consistencia.
